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6 maneras en que las mujeres pueden apoyarse mutuamente en el trabajo


Siempre se ha oído el mito de que las mujeres no se apoyan unas a otras, pero eso no es cierto. Las mujeres pueden ser poderosas aliadas en el trabajo y existen cosas simples que se puede hacer todos los días para celebrar y apoyar a sus compañeras de trabajo:


Asegurarse que las ideas de las mujeres son escuchadas

¿Sabías que?

Cuando las mujeres se quedan calladas, su estatus sufre: las mujeres que hablan menos en grupos de discusión son consideradas personas con menor influencia.


Situación

Si se mira a los hombres en las reuniones, es probable que se note que más de ellos se sientan en puestos delanteros y centrales, mientras que las mujeres tienden a ir hacia el final de la mesa y al borde la sala, lejos de las posiciones que demuestran estatus. Las mujeres también tienen menos tiempo para hablar en las discusiones grupales, son más interrumpidas, tanto por hombres como por mujeres y se les da menos crédito por sus ideas.


Solución

Como mujer se debe dar un buen ejemplo y sentarse adelante o en el centro y hablar alto en las reuniones y motivar a otras mujeres a que hagan lo mismo. También, busque maneras de dar forma a la conversación, cuando una mujer sea interrumpida, intervenga y diga que le gustaría oírla terminar. Cuando un compañero de trabajo continúe con la idea de una mujer, recuerde a todos que se originó de ella diciendo: "Gran idea... gracias a Katie por decirlo". Si ve a una mujer luchando por formar parte de la conversación, diga que le gustaría escuchar otros puntos de vista. Cuando se apoya a las compañeras de trabajo, ellas se benefician y se ven como líderes. Además, las reuniones son más efectivas cuando se escucha el punto de vista de todos.


Desafíe la situación de la sanción por simpatía

¿Sabías que?

En un estudio reciente de revisiones de desempeño, el 66 por ciento de las mujeres recibieron retroalimentación negativa sobre su estilo personal, como "a veces puede ser tosca", en comparación con menos del uno por ciento de los hombres.


Las mujeres se enfrentan a un doble estándar que los hombres no. Se espera que los hombres sean asertivos y seguros de sí mismos, de modo que sus compañeros de trabajo agradecen su liderazgo. En contraste, se espera que las mujeres sean cuidadosas y colaboradoras, de modo que cuando lideran, van en contra de las expectativas y a menudo, enfrentan el rechazo de hombres y mujeres. El problema es que las mujeres deben defender la idea de que ellas también pueden ser eficaces. Esta sanción de simpatía a menudo aparece en la forma en que se describe a las mujeres, tanto en las evaluaciones aprobatorias como en las de desempeño. Cuando una mujer habla en un estilo directo o sigue sus ideas, a menudo se la llama "agresiva" y "ambiciosa". Cuando un hombre hace lo mismo, es visto como "confiado" y "fuerte".


Cuando escuche a una mujer ser llamada "mandona" o "ruidosa", pida un ejemplo específico de lo que hizo la mujer y luego pregunte: "¿Tendrías la misma reacción si un hombre hiciera lo mismo? En muchos casos, la respuesta será no. Cuando tenga una respuesta negativa a una mujer en su trabajo, hágase la misma pregunta y dele el beneficio de la duda. Lo más probable es que sólo esté haciendo su trabajo.


Celebre los logros de las mujeres

¿Sabías que?

Según un estudio reciente de un candidato a doctorado en economía de Harvard, los hombres obtienen casi la misma cantidad de crédito cuando escriben un trabajo de investigación con un equipo mixto que cuando son el único autor. En contraste, las mujeres obtienen un crédito casi nulo si escriben un artículo como parte de un equipo con un hombre.


Con frecuencia, a las mujeres se les da menos crédito por resultados exitosos y se las culpa más por el fracaso. Además, las mujeres y los hombres responden al reconocimiento de manera diferente. Las mujeres a menudo atribuyen sus logros a factores externos como "tener suerte" y "ayuda de otros", mientras que los hombres atribuyen los suyos a cualidades y habilidades innatas. Ellos son dueños de su éxito y las mujeres socavan el suyo. Por el contrario, cuando las mujeres celebran sus propios logros, a menudo se las penaliza por autopromoción. Como resultado de estas dinámicas, las contribuciones de las mujeres pueden pasar desapercibidas.


Como mujer debe buscar oportunidades para celebrar los logros de otras mujeres y señale cuándo se culpa a las mujeres injustamente por cometer errores. Mejor aún, reúnase con un grupo de mujeres a celebrar los éxitos mutuos siempre que sea posible. Aunque las mujeres a menudo son penalizadas por promocionarse a sí mismas, usted puede promocionar a otras mujeres y ellas pueden hacer lo mismo por usted. Cuando presenta a sus compañeras de trabajo, resalte sus éxitos y logros, por ejemplo, podría decir: "Katie estuvo a cargo del lanzamiento de nuestro producto más reciente y generó más ventas que cualquier otra iniciativa este año".


Anime a las mujeres a que luchen por sus sueños

¿Sabías que?

Los hombres solicitan empleo cuando cumplen con el 60 por ciento de los criterios de contratación, mientras que las mujeres esperan hasta cumplir con el 100 por ciento.


Las mujeres son más propensas a dudar de sí mismas que los hombres y no es porque les falte un gen de confianza especial. Las mujeres enfrentan un campo de juego desigual en el trabajo. Este sesgo es tan pronunciado que el simple hecho de cambiar el nombre en un currículum vitae de una mujer por el de un hombre aumenta la probabilidad de contratación en un 61 por ciento. Debido a que el desempeño femenino es frecuentemente subestimado, las mujeres deben trabajar más arduamente para demostrar que son tan capaces como los hombres y es más probable que pasen por alto algunas tareas clave, promociones y aumentos. Las mujeres incluso tienden a subestimar su propio desempeño y es más probable que atribuyan sus fallas a la falta de habilidad. Debido a que el lugar de trabajo es más duro para las mujeres, ellas son más duras consigo mismas, su confianza a menudo se debilita.


Como mujer debe buscar oportunidades para aumentar la confianza de otras mujeres y animarlas a que sigan sus ideales. Si una compañera de trabajo le dice que no está lista para un nuevo proyecto o posición, recuérdele lo que ya ha logrado y ofrezca ser una compañera de ideas mientras ella se pone al día.


Dar a las mujeres una retroalimentación directa

¿Sabías que?

En un análisis reciente de cientos de revisiones de desempeño, el 60 por ciento de los comentarios sobre el desarrollo que recibieron los hombres estuvo vinculado a resultados empresariales específicos y, por lo tanto, pueden tomar acciones para mejorar, en comparación con solo el 40 por ciento de los comentarios sobre el desarrollo que recibieron las mujeres.


Las mujeres a menudo reciben menos comentarios útiles. Mientras que los hombres obtienen recomendaciones específicas para mejorar su desempeño, las mujeres escuchan una retroalimentación más genérica sobre la que es más difícil actuar, como “buen trabajo”, o “necesita más presencia en las reuniones”. Los hombres pueden dudar en dar retroalimentación critica a las mujeres por temor a provocar una respuesta emocional y es probable que este sea también el caso de las mujeres. Desafortunadamente, esta falta de informacion retrasa a las mujeres, es difícil desarrollar habilidades y avanzar si no se sabe qué hacer para mejorar.


Como mujer debe buscar oportunidades para darle a otras mujeres con las que trabaja información que las ayude a aprender y crecer, recuerde que retenerse por temor a que usted moleste a alguien no es beneficioso. Siempre que sea posible, comparta sus comentarios en vivo y en el momento en que sean más efectivo. Trate a la retroalimentación como un regalo y solicítela con frecuencia, se beneficiará de los aportes e idealmente sus compañeras de trabajo seguirán su ejemplo.


Sea mentora y patrocine a otras mujeres

¿Sabías que?

Sus compañeros pueden servir como valiosos defensores y asesores. Las mujeres en pequeños grupos de pares llamados Lean In Circles se animan mutuamente a seguir sus ideas y practicar las habilidades que necesitan para tener éxito. Como resultado, el 85 por ciento de los miembros atribuyen un cambio positivo en su vida a su Círculo.


La tutoría y el patrocinio son factores clave para el éxito, pero desafortunadamente las mujeres a menudo no lo reciben. Los hombres tienden a involucrarse en la mentoría de otros hombres porque tienen intereses compartidos, de hecho, dos tercios de los hombres que participaron en nuestro estudio Mujeres en el lugar de trabajo informaron que sus mentores eran en su mayoría hombres. Además, las mujeres tienen menos probabilidades de tener mentores que aboguen por ellas y las promuevan y este tipo de patrocinio es, en última instancia, lo que abre las puertas y crea oportunidades. Estas diferencias ayudan a explicar por qué menos mujeres terminan en roles de liderazgo.


Como mujer dedica el tiempo y la energía para guiar a otra mujer. Si está al comienzo de su carrera, no subestime el valor de su aporte, es posible que haya pasado por lo que está experimentando una mujer que comienza. Si es mayor, vaya más allá de ofrecer consejos y use su influencia para abogar por su mentee. El patrocinio es una excelente manera para que las líderes mujeres se unan para ayudar a las mujeres en sus carreras.

Artículo publicado por:Lean In

Traducido por:Women for Women Ecuador

Link del artículo original:https://leanin.org/tips/workplace-ally#tip6

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